CBD como tratamiento para el autismo

¿Qué es el autismo?

El autismo es un padecimiento neurológico que inicia en la niñez y continua por toda la vida adulta de las personas diagnosticadas. Incluye una gran variedad de síntomas, por lo que se le llama Trastorno de Espectro Autista (TEA). El autismo afecta la forma de relacionarse con el entorno de las personas que lo tienen, la comunicación y el aprendizaje.

En algunos casos se presentan conductas repetitivas, hasta el momento no se sabe porqué se produce, se piensa que es una mezcla de factores genéticos y ambientales. Generalmente los primeros síntomas aparecen antes de los dos primeros años de vida, sin embargo el trastorno puede aparecer a cualquier momento de la niñez.

Según una guía publicada por la Asociación Americana de Psiquiatría, los síntomas del TEA se clasifican en dos categorías: 

a) Problemas con la comunicación y las interacciones sociales. En esta categoría se incluye dificultades para hacer amigos, problemas con la reciprocidad socio – emocional y dificultades con la comunicación no verbal.

b) Patrones y actividades de comportamiento repetitivos o restringidos 

Que se sabe del CBD

El CBD o cannabidiol es uno de los más de 100 compuestos que se extraen de la marihuana. Esta sustancia, junto con el THC (tetrahidrocannabinol), son de los más populares y estudiados en la actualidad. Existen varios tipos de CBD, el de espectro completo, el cual conserva todos los demás componentes de la marihuana. Mientras que el CBD de amplio espectro conserva la mayoría de los componentes excepto el THC y el el CBD aislado o puro el cual, como su nombre lo indica, no contiene ningún otro componente de la planta. 

El CBD puede tener varias presentaciones como tinturas, comestibles, aceites, tópicos (lociones, parches, cremas y pomadas), jugos y cápsulas.

Hasta el momento se han realizado un sinnúmero de investigaciones y estudios para determinar las propiedades terapéuticas y medicinales del CBD y se ha encontrado que tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y analgésicas, por lo que es usado para varios padecimientos como la depresión, ansiedad, migraña, fibromialgia, insomnio, epilepsia, dolores crónicos, náuseas, dermatitis, acné, entre otros. Además, es usado de forma tópica para golpes, y en cremas y productos cosméticos.

El CBD para personas con autismo

Las investigaciones en cuanto a que el TEA pueda ser tratado con CBD aún no son concluyentes por lo que se se están realizando estudios más robustos. Algunos expertos opinan que el CBD sí puede ofrecer beneficios para el autismo; sobre todo, ya que como se sabe, el TEA incluye un gran número de síntomas y para varios de ellos el CBD tiene eficacias comprobada. 

En algunos de los estudios más recientes se han encontrado los datos siguientes: 

• En un estudio realizado en el año 2018 se encontró que el aceite de CBD ofrece beneficios para niños con TEA. Sin embargo, se recomendó que se lleven a cabo ensayos clínicos más robustos para evaluar su eficacia y seguridad. 
• En 2019, se realizó una investigación con 188 personas con TEA y se obtuvieron resultados en los que se pudo confirmar que el CBD resultó seguro, eficaz y bien tolerado para aliviar sus síntomas. 
• En otro pequeño estudio, en el mismo año, se encontró que el CBD fue eficaz para disminuir los ataques epilépticos en personas con TEA en casi todos los individuos estudiados, con excepción de uno.  
• Una investigación en el año 2020 determinó que el CBD es una sustancia eficaz para aliviar los síntomas del TEA e incluso sugirió que puede ser considerado como un tratamiento para este trastorno. 
• Existen estudios que buscan determinar si el CBD podría disminuir la irritabilidad y agresividad que algunos niños con TEA suelen padecer, por lo que se requiere seguir evaluando el impacto en la conducta de personas que tienen TEA.

Conclusiones sobre CBD y autismo

Algunos investigadores señalan que la combinación de CBD con THC podría resultar más benéfica para el tratamiento del autismo que usar cualquier sustancia derivada del cannabis por sí sola, a esto se le conoce como efecto séquito. 

La FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) reconoce los beneficios potenciales del CBD como tratamiento para el TEA, pero señala que hacen falta más estudios. Además, actualmente el único medicamento aprobado en los Estados Unidos que tiene como principio activo el CBD es el Epidiolex, el cual está indicado para el tratamiento de algunas formas resistentes de epilepsia en niños. 

La OMS señala que el CBD es bien tolerado y seguro sin indicios de generar dependencia; también apunta los posibles efectos secundarios que genera, los cuales son fatiga, diarrea, cambios de peso y de apetito, entre otros. 

Es muy importante tener en consideración que el CBD no es un producto milagroso para el TEA, y que los estudios aún se encuentran en fase experimental. Además, como cualquier sustancia, el CBD puede interferir con los efectos de otros medicamentos, por lo que es importante consultar con un médico antes de incluir el CBD en cualquier tratamiento.

Con información de Healthline y Green Entrepreneur.