Los refugiados de la cannabis medicinal son personas que necesitan de un tratamiento derivado de esta hierba para mejorar su salud y que legalmente no pueden hacerlo. Lamentablemente, muchos de los sitios en donde viven poseen leyes en contra de la cannabis, lo que los obliga a moverse a territorios en donde puedan acceder a marihuana legal. Esto le pasó a Emalee Hyde, emprendedora y dueña de SinSemilla and The City, una agencia de relaciones públicas que está despegando dentro de la industria cannábica estadounidense.
Había que moverse a Oregon, entonces, para que pudiera gozar de un tratamiento digno de CBD. Y no solamente se alejó de su pueblo natal, además, se lanzó a conquistar espacios en la creciente industria de la marihuana en Estados Unidos. Su labor está empoderando a las mujeres dentro de esta competitiva industria que genera ganancias millonarias cada año.
¿Su mayor logro? Colocar por primera vez en la historia una publicidad cannábica en un auto de la Nascar. Si, uno de los deportes más estadounidenses y populares vistió un logo de una empresa cannábica. Luego, la propia Nascar ordenó retirarlo por problemas legales con el gobierno de Colorado. Pero esto no quita el hecho de que tanto la firma como la industria en general están conquista cada vez más espacios poco a poco.
Emalee Hyde, al igual que otras muchas personas dentro de la industria, busca apoyar a las marcas para que lleguen a la mayor cantidad de posibles consumidores. Claramente esto tiene sus trabas legales, como acabamos de ver. Por eso es que Hyde se especializó en derecho en la Florida State University.
En su labor para apoyar la regulación y legalización de la cannabis medicinal en ciertos estados de la unión americana que aún no lo permiten, Hyde ha creado junto con otros activistas pro cannábicos la iniciativa Regulate Florida, que se mueve bajo la consigna “regular la marihuana igual que al alcohol”. Se busca terminar con el trato despectivo y prejuicioso que tienen las autoridades cuando se detiene a personas bajo los efectos de la cannabis. Siempre dándoles un peor trato que a personas alcoholizadas al volante.
“¿Los adultos responsables y los pacientes medicinales realmente merecen este tipo de maltrato?”, señalan, resaltando las enormes tasas de accidentes que se generan al año en Estados Unidos gracias a conductores en estado de ebriedad. Lo que es mucho más grave que detener a personas que solamente han consumido cannabis.
SinSemilla and The City, su firma de relaciones públicas, busca precisamente eso. Crear conciencia y ampliar la cultura cannábica responsable. Por eso se autodenominan “la más alta calidad en estilo de vida y relaciones públicas dentro de la industria de cannabis y cáñamo”, dice en su Facebook oficial.
Al igual que Hyde, miles de personas están buscando en la industria una oportunidad dorada para formar parte de las ganancias millonarias sin relacionarse con la planta directamente. Esto les evita pagar altos impuestos y les permite desarrollar la industria desde áreas distintas como la legal, la mercadotecnia, la publicidad, entre otras.
Hyde tuvo que salir de Florida para poder acceder a un tratamiento decente. A pesar de las negativas del gobierno, este estado recién azotado por un huracán está abrazando cada vez más la idea de permitir que se consuma cannabis para bien de la salud de los enfermos. Las proyecciones varían, pero la estimación del consenso es que la industria de la cannabis medicinal superará los 1000 millones de dólares para 2020. Tan solo en Florida.
Por eso es que la firma de Hyde se encuentra en Oregon, un estado completamente abierto a la cannabis lúdica y medicinal. Y es que este estado de la nación regida por Donald Trump permite que se fume… y mucho. Ha generado un gran turismo verde que le ha dado el mote de “el Amsterdam de la cannabis”, por lo que no hay mejor territorio para emprender un negocio dentro de esta industria. Algo que Hyde está haciendo de forma perfecta.
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