A medida que la legalización del cannabis recreativo avanza, más personas consumen esta planta dentro de su hogar, el cual comparten con sus mascotas. Antes de poner marihuana al alcance de los animales domésticos, los fumadores deben tener en cuenta cuestiones fundamentales para no intoxicar a sus perros.
Según un estudio realizado por la universidad de Guelph, en Canadá, existe una correlación entre la tendencia a la despenalización del cannabis y la cantidad de casos de perros intoxicados que se reportan mensualmente.
El estudio se realizó basado en cifras estadounidense del consumo de productos permitidos. Como conclusión, recomendó a los consumidores de cannabis evitar comprarlo en el mercado negro. Las cifras apuntan a que las consecuencias son más graves, debido a que estos productos no siguen las pautas de empaquetado y las dosis son mucho más altas.
La principal razón por la que los perros se intoxican con cannabis, sobre todo si contiene THC, es que pueden masticar la planta o los productos derivados, incluso si se encuentran dentro de su empaque. Esto se da pese a que existen normas federales estrictas para garantizar que los productos se empaqueten de manera segura.
THC y perros
En una entrevista con CNN, la doctora veterinaria Dorrie Black explicó las diversas formas por las que usualmente los perros ingieren marihuana, las cuales pueden ser desde comerse la colilla de un cigarro hasta ingerir las sobras de los comestibles, ya sea en casa, en la calle o en los parques.
Esto sucede, sobre todo, en las grandes ciudades, donde la probabilidad de encontrar residuos de marihuana es enorme, incluso en las heces de los propios fumadores.
La especialista indicó que tales situaciones redujeron el estigma que conlleva informar sobre los casos de envenenamiento por cannabis en perros, ya que ahora no existen sanciones por usarlo en los estados donde es legal. Esto puede explicar el aumento en los incidentes reportados, señaló Mohammad Howard-Azzeh, veterinario que lidera el estudio.
Por su parte, la doctora Black reveló que hubo un aumento significativo en los informes de intoxicación por cannabis en perros en áreas donde la planta está legalizada. El envenenamiento accidental también fue más común en ciudades con alta variabilidad de ingresos y en áreas urbanas. Los perros machos más pequeños que no fueron esterilizados parecieron verse afectados de manera desproporcionada.
«Los perros no discriminan mucho lo que comen y se sabe que arrebatan la comida de los mostradores de la cocina y de las mesitas de noche, así como también comen cosas en el suelo o del suelo», dijo Howard-Azzeh, como principal explicación ante el aumento de casos.
Sintomas de intoxicación en perros
Ahora bien, es importante que los dueños puedan identificar cuándo sus perros han consumido marihuana, para que tengan la atención médica necesaria. Entre los síntomas destacan:
- Movimientos tambaleantes
- Goteo de orina
- Mirada aturdida u ojos vidriosos
- Baja temperatura
- Nerviosismo
Vale la pena mencionar que ninguno de los veterinarios entrevistados comentó que el consumo de THC o cannabis haya sido la causa de la muerte de algún perro u otro tipo de mascota. Sin embargo, es recomendable acudir de inmediato al veterinario.
En contraste, un estudio realizado por el Departamento de Emergencias de la Wheat Ridge Veterinary Specialists, en Colorado, encontró que dos perros murieron después de comer productos horneados con chocolate y mantequilla con infusión de marihuana. Sin embargo, no está claro si fue por la marihuana, el chocolate o la combinación de esos ingredientes. Cabe recordar que la mantequilla y el chocolate negro son altamente tóxicos para los perros.
Ahora bien, en lo que respecta al tratamiento, la doctora Black señala algunas opciones como inducir el vómito, bombear el estómago de un perro o darle carbón activado, lo que ayudará a eliminar la marihuana del sistema.
¿Cuánto tardan los perros en desintoxicarse por cannabis?
Aunque es importante precisar que la desintoxicación no sucede de inmediato, pues un perro tarda por lo menos 24 horas en volver a la normalidad, esto varía dependiendo de la potencia y de la cantidad de marihuana que haya consumido.
Black recordó que, al principio de su carrera en medicina veterinaria de emergencia, la toxicidad por marihuana consistía en que un perro comiera la colilla de un cigarro con cantidades bastante bajas de THC, pero con el tiempo, esta toxicidad aumentó, debido a la ingesta accidental de derivados o de cannabis medicinal.
También, puede ocurrir la administración intencional por parte de los propietarios, principalmente adolescentes, ya sea por medio de alimentos que contengan cannabis o por humo residual del fumador.
Los perros menores de un año son las víctimas más frecuentes de esta intoxicación. Según el Centro de Control de Intoxicación Animal de los Estados Unidos de la American Society for the Prevention of Cruelty in Animals (ASPCA), 96 % de las intoxicaciones por cannabis ocurren en caninos y 3 % en los gatos, completando el 1 % restante algunas otras especies.
Otros detalles del consumo en perros
La absorción por vía oral es impredecible y errática. El inicio de la acción es más lento y se produce un pico de concentración en sangre mucho menor debido a un efecto de primer paso en el hígado, donde el THC es degradado por enzimas del sistema citocromo.
En seres humanos, el pico de concentración de THC en la sangre ocurre usualmente luego de 60 a 120 minutos de la ingestión oral y las concentraciones obtenidas equivalen a entre un 25 % y un 30 % de las conseguidas por vía inhalatoria en humanos.
Su absorción se incrementa si se ingiere con grasas, aceites o solventes polares como el etanol, dado que los cannabinoides tienen afinidad por las partículas de grasas.
En perros, el 80 % del THC es eliminado del organismo en aproximadamente cinco días. Además, entre el 65 % y el 90 % del THC es eliminado de forma directa o a través de metabolitos de las heces. Finalmente, entre el 10 % y el 35 % restante se excreta por la orina.
Es importante precisar que los animales intoxicados se recuperan con cuidados adecuados en 24 o 36 horas, pudiendo llegar a presentar síntomas hasta 72 horas posteriores al consumo.
Dado que no existe un antídoto específico para la intoxicación por cannabis, el tratamiento de un perro intoxicado será siempre sintomático y de soporte. En el caso de que el consumo haya sido por vía oral, la descontaminación del tracto digestivo se puede realizar siempre y cuando la mascota se encuentre asintomática.
Con información de CBD.ca, CNN, Ncbi y Scielo.edu
Foto: 877334 / Pixabay
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