La despenalización del cannabis impulsada por países como Canadá comenzó a dar sus primeros frutos en 2018, trayendo consigo que las bebidas THC pudieran estar pronto a la venta.
Pese a que todavía hay trabas en lo concerniente a la regulación del cannabis, la industria de bebidas lleva años experimentando con el cannabis como un ingrediente, que le daría un giro a este segmento.
Bebida con THC, un nuevo negocio
Sin embargo, dicha experimentación radica en pequeñas dosis, idóenas para situaciones informales y un consumo ocasional, dirigidas a jóvenes consumidores.
Cabe destacar que los avances son tan significativos que se espera que Canadá legalice las bebidas infusionadas de cannabis a lo largo este año, lo que iniciaría con una carrera por el desarrollo y venta de este tipo de bebidas.
En este sentido, Constellation Brands, quien ahora es dueño de Corona, pretende marcar pauta, por lo que invirtió cuatro mil millones de dólares en la compañía canadiense Canopy Growth, firma especializada en aceites, concentrados y plantas secas.
Este paso coloca a la firma como punta de lanza hacia la industria del cannabis e incluso pensar en el mercado medicinal, por ser de mayores dimensiones al recreativo.
“El mercado que se abre es potencialmente una de las oportunidades de crecimiento global más importantes de la próxima década”, dijo el presidente ejecutivo de Constellation, Robert Sands.
Esto debido a que las ventas de marihuana legal y productos relacionados podrían alcanzar los 200 mil millones de dólares para 2034, el mercado se está abriendo mucho más rápido de lo que se pensaba”, agregó Sands.
¿Es ilegal?
Tal aseveración ha hecho que firmas como la multinacional Diageo, el mayor productor de licores del mundo, que incluye marcas como Smirnoff y Johnny Walker, haya iniciado conversaciones con productores canadienses, según Bloomberg.
De acuerdo con cifras se Canaccord Genuity las ventas de bebidas con THC y CBC podrían alcanzar los 600 millones de dólares para 2022.
Quizá por ello, nadie se quiere perder una rebanada del pastel, pues incluso los cerveceros han volteado a ver al cannabis, aunque, por el momento, usar THC en bebidas alcohólicas es ilegal.
Artet, un aperitivo con THC
Según consta en la publicación, Artet esta creado para servirse antes de la comida, como una bebida no tan dulce, sino sofisticada, memorable y tan fácil de mezclar que puede confundirse con un cocktail Negroni.
Artet viene dosificado con cantidades muy bajas de THC, que a decir de sus creadores Maxwell y Zachary Spohler, y Xander Shepherd, quienes aseguran que en realidad estimula su estómago y lo hace sentir más hambre, un beneficio mutuo para la industria alimenticia.
“El aperitivo es una bebida que se toma al comienzo de la noche para crear el estado de ánimo, estimular el apetito y eliminar la jornada laboral. En Artet, el cannabis finalmente puede desempeñar un papel en un comportamiento tradicionalmente reservado para el alcohol. En lugar de una bebida desalcoholizada, construimos una bebida a prueba de cero desde cero con cannabis en el núcleo, inspirada en notas de sabor de aperitivos icónicos”, relata Maxwell.
Para estos amantes de la mixología, las bebidas con cannabis son algo nuevo, pero fascinante y otorgan la ventaja de ofrecerle a los consumidores un sabor especial.
“Las bebidas de cannabis siguen siendo un fenómeno relativamente nuevo. Estamos entusiasmados de trabajar con otras compañías de bebidas en cannabis para avanzar juntos en la categoría”, aseguró Maxwell.
Aunque para hacerlo todavía se necesita mucha educación para que los consumidores puedan aprender a usar estas bebidas, aunado a una mayor regulación para consolidar el mercado, puntualizaron los emprendedores.
Con información de Forbes, Xataca,LifeandStylen y Guatevision.
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