Luego de la presentación en octubre pasado de la iniciativa de ley 5295 en el Senado, Brasil aprobó la regulación para el cáñamo y la marihuana medicinal, así como la importación de esta última, aunque condenó el cultivo doméstico.
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) permite las regulaciones para la venta de productos elaborados con cannabis, así como el cultivo industrial del cáñamo para una empresa específica.
De esta forma, el gobierno determinó los procedimientos para la fabricación e importación de dichos productos y los requisitos de prescripción, venta, empaque y supervisión de medicamentos derivados del cannabis, medidas que imponen nuevas reglas en el mercado de negocios.
Regulación precisa
Las regulaciones se darán a conocer en la Gaceta Oficial del gobierno brasileño en los próximos días y se convertirán en ley 90 días después de su publicación.
Vale mencionar que, desde 2015, Anvisa permite la venta de productos con cannabis en Brasil mediante una regulación con dos tipos de prescripciones. La primera alude a los compuestos de más de 0.2 % de THC que son solo para pacientes en fase terminal, mientras que la segunda enmarca a todos los productos con menos de 0.2 % de THC.
Entre las marcas de productos con cannabis que ya se pueden obtener en Brasil se encuentran HempMeds y Formula Swiss, las cuales tienen un precio aproximado entre 55 y 332 dólares. Este monto resulta muy costoso, pues el salario brasileño es de 250 dólares por mes.
Sin embargo, este proceso no es solamente cuestión de dinero, sino también burocracia. Actualmente, Anvisa solicita la autorización del gobierno para importar medicamentos, lo que significa que los usuarios deben pagar los costos de importación.
¿Brasil hará negocio?
Para los especialistas, tal situación es grave, pues arroja a los consumidores, tanto recreativos como medicinales, a comprar cannabis en el mercado no regulado para evitar pagar más.
Respecto a otra parte importante de esta industria, la del cáñamo comercial, Anvisa autoriza el cultivo de forma monopólica a la empresa Terra Viva, siempre y cuando las semillas contengan una concentración de THC de menos del 0.3 %.
Por su parte, el Ministerio de Agricultura determinó la inclusión del cáñamo en la lista del Registro Nacional de Cultivares, que regula todos los productos que se pueden sembrar y cosechar legalmente en el país sudamericano.
En este sentido, la compañía Terra Viva está autorizada para importar y luego cultivar semillas de cáñamo, así como para liberar el comercio de su fibra, hojas y semillas en forma natural o después del procesamiento para la extracción de aceite en Brasil.
Además, la fibra de cáñamo industrial podría usarse en la elaboración de varios productos, como ropa, zapatos, artículos de belleza, aceite de cocina, detergente para ropa, papel, pinturas y aislantes, lo que implica más posibilidades de hacer negocios.
Con información de Forbes, RT y RNC Radio
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