El año 2019 ha sido brutal para la industria de la marihuana, desde las pérdidas que las compañías más importantes de cannabis sufrieron en la bolsa de valores a finales de marzo hasta la rápida huida de los inversionistas. ¿Será que las tendencias para 2020 irán en el mismo sentido?
A finales del primer trimestre de este año comenzó un derramamiento de sangre en las compañías de cannabis. El stock existente en América del Norte se desplomó un 63 % luego de que los inversionistas emprendieran la huida por las nuevas regulaciones de mercados de California y de Canadá.
Además, el cannabis almacenado perdió significativamente su capitalización de mercado, por la incertidumbre que asedia a todos por el crecimiento de la industria y de la situación legal de la hierba.
Canadá lanzará productos derivados del cannabis. Comestibles, bebidas de infusión herbal, dispositivos electrónicos para vapear, pomadas y todo lo que te imagines.
En Canadá, el negocio de la marihuana y sus derivados es, quizá, un tanto más fructífero. Esto podría deberse a distintos factores como la legalización a nivel nacional y el acceso que tienen los inversionistas de Estados Unidos (lo cual no es ilegal) que, a su vez, cotizan en los mercados bursátiles.
Desde que Health Canada anunció el lanzamiento de su línea de productos derivados de la marihuana hasta la venta a partir de este diciembre, los inversionistas han esperado con ansias, ya que cuentan con un margen de ganancia mayor que la marihuana seca y son cada vez más populares entre los adultos jóvenes.
Tras la promulgación de la Ley Agrícola en 2018, producir cáñamo a nivel industrial y distribuir productos con cannabidiol ya es legal en los Estados Unidos.
Los especialistas proyectan un crecimiento de todos los productos relacionados con cannabidiol en dicho país, pues de manera anual, los ingresos por ventas de CBD están aumentando más del 100 %. Estos números podrían representar utilidades por más de veintitrés mil millones de dólares para 2023.
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos prácticamente redujo a cero las posibilidades de que alimentos y bebidas con cannabidiol lleguen pronto a las tiendas, pues la Administración de Drogas y Alimentos informó que este ingrediente podría resultad dañino para la salud cuando se utiliza como aditivo para productos ingeridos.
Si algo ha afectado al negocio del cannabis es el mercado negro, por ejemplo, vendedores que no pagan impuestos y que ofertan marihuana a precios más bajos.
Una de las tendencias de mayor relevancia es el grado de confianza que podrían llegar a tener los inversionistas en determinadas acciones de cannabis.
Se espera que en este 2020 exista mayor transparencia en la industria de la marihuana con la finalidad de atraer inversión a largo plazo.
Un ejemplo en 2019 fue la compañía CannTrust, que en julio sufrió un fuerte golpe cuando se descubrió que durante 6 meses cultivó marihuana en cinco habitaciones sin contar con licencia. Esta producción ilícita era del conocimiento de su exCEO, Peter Aceto.
Las repercusiones legales fueron fuertes para CannTrust, por lo que tuvo que suspender sus licencias de cultivo y de ventas para Health Canada y destruir 58 millones de dólares en marihuana que ya habían producido en esas habitaciones sin licencia.
Información de Quartz y The Motley Fool.
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