Escribieron una carta a la Asociación de Jugadores con el propósito de ofertar un equipo para un estudio del uso potencial de la hierba para combatir el dolor.
Este hecho se vio perfectamente ejemplificado el año pasado, cuando un jugador sufrió la suspensión por hacer uso de la marihuana para tolerar la sintomatología causada por la enfermedad de Crohn que padecía, puesto que actualmente, el uso de la marihuana en el deporte se encuentra prohibido. Pero esta situación podría estar evidenciando un vuelco sustantivo en sus políticas.
Recientemente, la NFL escribió una carta a la Asociación de Jugadores pertenecientes a la NFL (NFLPA), con el propósito de ofertarle un equipo profesional para un estudio del uso potencial de la cannabis en el manejo terapéutico del dolor, tanto agudo como crónico.
Puesto que la NFLPA está realizando de manera independiente su estudio, la NFL está a la espera de si esta entidad le da una respuesta positiva a su propuesta.
Esto evidencia un posible cambio de su postura, bastante radical y anti marihuana que venían sosteniendo, tradicionalmente, dadas las estrictas políticas que instituían sanciones muy severas para aquellos jugadores a los cuales se les detectaban las más mínimas concentraciones de marihuana en sus sistemas.
En palabras de Joe Lockhart, vicepresidente ejecutivo de comunicaciones de la NFL: "Esperamos trabajar con la Asociación de Jugadores en todos los asuntos relacionados con la salud y seguridad de nuestros jugadores”.
El sindicato, con su postura más abierta ante el uso de la marihuana, si bien ha indicado previamente que está estudiando por sí solo la marihuana como un útil instrumento en el manejo del dolor, desea cambios en paralelo en lo que respecta a la normativa del uso recreativo de la cannabis, para que esta supuesta incorporación terapéutica no vaya a caer o confundirse con un tipo de adicción en sus usuarios potenciales.
Este sindicato formó de manera independiente un comité destinado al manejo del dolor para realizar sus estudios, entre otras cosas, de la marihuana como una herramienta de manejo del dolor en aquellos jugadores afectados, por algún tipo de secuelas crónicas, difíciles de manejar a través de los fármacos convencionales. Este comité corresponde a una subdivisión del Comité de lesiones cerebrales traumáticas de la NFLPA Mackey-White.
La liga y el sindicato acordaron en el año 2014 algunas modificaciones de la política de drogas con respecto a la marihuana. El umbral para lo que constituye una prueba positiva para la marihuana fue rebajado. Un nivel de 15 nanogramos de THC (tetrahidrocannabinol) por mililitro de orina o sangre se contó como positivo, el estándar más estricto en los deportes profesionales, antes de 2014. Bajo la revisión, 35 nanogramos por mililitro cuenta como positivo; (a modo orientativo, 1 nanogramo corresponde a la billonésima parte de 1 gramo)
Dado el potencial riesgo de adicción a este tipo de sustancias, DeMaurice Smith, director ejecutivo de la NFLPA manifestó: "Creo que es importante mirar si hay problemas de adicción. Y que es importante no simplemente asumir que la recreación es la razón por la que se está usando”.
"Hemos tenido varias conversaciones sobre este tema y hace varios años tomamos un enfoque menos punitivo de la marihuana", dijo el comisionado de la NFL, Roger Goodell, al ser entrevistado en Fox en el mes de enero “ Ese será uno de los temas del proceso de negociación colectiva, que nos gustaría abordar más pronto que tarde".
Si bien el sindicato no ha presentado una propuesta formal sobre un enfoque más permisivo con respecto al uso de la marihuana por los jugadores de la liga desde comienzos de este año, que tuvieron lugar los comentarios de Smith, que se debería, según fuentes allegadas, a que la liga estaría reservando este tema para abordarlo dentro del marco de las negociaciones colectivas, y no como una temática aparte, puesto que actual acuerdo entre la liga y el sindicato tiene una validez hasta el 2020.
Para la liga, este cambio pudo haberse suscitado tras un estudio publicado recientemente por la prestigiosa revista JAMA, que encontró que en un grupo de 111 jugadores de la NFL fallecidos, cuyos cerebros fueron donados a la ciencia, 110 de ellos presentaban encefalopatía traumática crónica (CTE), una enfermedad cerebral degenerativa causada por golpes repetidos en la cabeza.
Puesto que se ha señalado que algunos compuestos presentes en la cannabis podrían tener cierto efecto neuroprotector, aparte de su función paliativa contra el dolor agudo y crónico, así como contra el estrés, posterior a lesiones de diversa gravedad, podría ser una medida oportuna y beneficiosa para los jugadores que integran la liga del deporte más aclamado y popular del país, a la vez, emocionante y de alto riesgo para quienes lo practican.
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