Con el avance de la regulación local del cannabis recreativo en Estados Unidos, Chuck Schumer, líder de la mayoría del Senado, se pronunció a favor y nominó al 20/4 como un día feriado no oficial en el calendario estadounidense, pero que podría ser una fecha oficial en los próximos años.
Horas después, Jen Psaki, secretaria de prensa de Joe Biden, dejo entrever la postura a favor del cannabis que sostiene el presidente, pero siguió sin dar más detalles sobre la legalización a nivel federal.
En un mensaje emitido desde la Casa Blanca, Psaki señaló que Biden apoya el derecho a que cada estado decida autónomamente si legaliza o no la marihuana recreativa, así como también su derecho a legislar sobre el uso del cannabis medicinal.
"El presidente quiere dejar en manos de los estados este tipo de decisiones sobre la legalización para uso recreativo, reprogramar el cannabis como una droga de la Lista II para que los investigadores puedan estudiar sus impactos positivos y negativos y, a nivel federal, apoyar la despenalización del consumo de marihuana y la eliminación automática de cualquier registro criminal", enfatizó la funcionaria.
Pese a estas declaraciones, Psaki recibió una serie de cuestionamientos directos sobre la postura de Biden respecto a la legalización a nivel federal y la salida de prisión de decenas de ciudadanos juzgados por el uso de marihuana. Esta situación originó vacilación en las respuestas de Psaki, quien no pudo definir con claridad el punto de vista de la Casa Blanca.
Respecto a la eliminación de condenas por delitos relacionados con la planta, el reportero del New York Post, Steven Nelson, preguntó a Psaki sobre si Biden cumpliría su promesa de campaña con respecto a la liberación de todas las personas que están en prisión por delitos relacionados con la marihuana.
En respuesta, la jefa de prensa evadió el cuestionamiento, argumentando que se trataba de una pregunta en términos jurídicos, por lo que debía consultar a su equipo legal antes de dar una respuesta, pues todavía no tenía ninguna información adicional.
Otro reportero cuestionó a la funcionaria sobre por qué el presidente Biden todavía se opone a la legalización del uso adulto del cannabis, a pesar de que el 70 % de los votantes en Estados Unidos apoyan la legalización a nivel federal. A esto, Psaki alegó que Biden conoce muy bien el panorama y quiere despenalizar el uso adulto del cannabis, pero no sin antes analizar los impactos positivos y negativos de tal acción.
Tal respuesta originó polémica, pues en días recientes se dio a conocer que varios grupos de presos por delitos relacionados con el cannabis solicitaron a Biden su liberación y, con esto, el cumplimiento de su promesa de campaña. Algunos rumores apuntan a que la inacción de Biden se debe a que está en desacuerdo con las propuestas de reforma integral en las que están trabajando los líderes del Congreso, lo que indicaría que podría rechazar la nueva propuesta de ley.
En contraste, Schumer sostuvo una visión positiva acerca de la regulación del cannabis a nivel federal y aludió el caso de éxito de la legalización del cannabis recreativo en Nueva York, donde existe un sólido programa de justicia social.
"La guerra contra las drogas ha sido una lucha contra las personas, particularmente, en contra de la gente de color. No tiene sentido y es hora de cambiar. Creo que ha llegado el momento de poner fin a la prohibición federal de la marihuana en este país y estoy trabajando con los senadores Booker y Wyden para lograrlo", indicó Schumer.
Schumer aclaró que las predicciones pesimistas que se habían previsto para estados como Colorado y Oregón nunca ocurrieron. Para el funcionario, esto significa que, a través de iniciativas electorales y enmiendas constitucionales, el pueblo estadounidense está enviando un mensaje claro de que quiere que se cambie esta política.
El senador mencionó que está trabajando en un borrador sobre la reforma, donde no está definida la finalización de la prohibición federal, pero sí pretende garantizar la justicia restaurativa, proteger la salud pública e implementar impuestos y regulaciones responsables.
Cabe recordar que, durante las décadas de los ochenta y los noventa, Biden encabezó diversas luchas políticas contra el uso de sustancias ilícitas y ayudó a redactar un proyecto de ley que endureció las sanciones penales federales contra todo tipo de drogas, lo que incrementó el número de detenciones por el uso de drogas como la marihuana.
Con información de Forbes, Marijuana Moment y Vox
Foto: Zane Bolen / Unsplash
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